¿Qué pasa con nuestras mascotas en invierno? ¿Están suficientemente protegidas? ¿Tenemos que tener algún cuidado en especial? Ellos ya tienen el abrigo puesto. Hace algunos meses han hecho un cambio de vestuario y se han puesto un traje más tupido y que les protege mejor de las bajas temperaturas, pero, hoy hace un día precioso y se nos ha ocurrido llevar a nuestro perro a la nieve, no hemos ido nunca ¿Qué precauciones debemos de tener?
Desde luego vamos a pasar un buen rato, a los perros les encanta la nieve, saltan corren, se resbalan,…, se la comen. Vale el atracón de nieve será, probablemente, el primero de nuestros problemas, la nieve es agua destilada y le va a provocar una diarrea «osmótica», que seguramente se les pasará sola, pero para la que debemos de estar prevenidos.
El segundo problema es que, con toda esa actividad, nuestra mascota va a acabar empapada, cuando llegue al coche se va a quedar dormida y ahí es cuando puede coger frío. Debemos de secarle lo mejor que podamos para evitar resfriados, no es mala idea llevar una toalla para frotarle bien antes de meterle en el coche.
En tercer lugar debemos de preocuparnos de sus pies, tanto las almohadillas como la piel entre los dedos sufre por el frío y también se puede lesionar por la abrasión del hielo. Debemos de protegerlos bien con crema, tampoco es mala idea ponerles unos «patucos». Después de nuestra excursión revisaremos las extremidades del animal y le pondremos un poco de aceite o crema hidratante.
Otro punto de atención en invierno son Los temidos virus del resfriado que no sólo afectan a los humanos durante el invierno. Los cambios bruscos de temperatura, la humedad, los contagios y la falta de prevención pueden provocar diversas enfermedades a nuestras mascotas, especialmente a cachorros y viejos, al igual que en las personas estas enfermedades de invierno afectan especialmente al aparato respiratorio.
Dentro de las enfermedades más comunes se destacan la traqueo bronquitis infecciosa y la bronconeumonía, que presentan síntomas como tos, expectoración, y pueden agravarse con, fiebre, dificultad respiratoria, decaimiento, y anorexia. La traqueo bronquitis infecciosa es una enfermedad muy contagiosa, El virus se transmite por el aire, en las gotitas de las toses y los estornudos para penetrar a través de la nariz e infectar infectando a otros perros.
Otras enfermedades que se agravan con el frío son todas las dolencias del aparato locomotor, como la artritis o la artrosis. En estos casos, el dolor se intensifica y dificulta la movilidad del animal pero, es necesario que la mascota siga haciendo ejercicio físico y tal vez, siempre bajo consejo de tu veterinario, el tratamiento antiinflamatorio, condro-protector y/o el control del peso.
Son más comunes los casos de dermatomicosis. Los hongos en la piel se ven favorecidos por la alta humedad ambiental y por el calor de las calefacciones en nuestros hogares. El cuadro típico se presenta con alopecias, es decir pérdida de pelo, de forma más o menos circular y generalmente poco pruriginosa (que pica poco) Esta es una enfermedad contagiosa a la que debemos prestar una especial atención porque puede afectar a las personas.
Finalmente debemos vigilar la ganancia de peso de nuestra mascota que, por el frío, la lluvia o la falta de tiempo está menos activo y tiende a engordar.